sábado, 2 de junio de 2012

Crucemos el Mar de la hipocresía:



Crecemos, prevalecemos, nos consumimos, pero nos fortalecemos en la esperanza y la ilusión, somos autos suficientes, pero ignorantes de la verdad, nos desarrollamos en cualquier ámbito que sea, superamos los desafíos, pero nunca alcanzamos las metas propuestas,

Cultivamos valores, descartamos sentimientos, nos aferramos a mitos y supersticiones y perdemos la fuerza de la fe, entre laberintos de prejuicios, el que dirán y lo que piensen los demás es el alimento del día a día, las doctrinas en la familia es una constante mentira de los valores a desarrollarse en los niños,

Cuando a la verdad no sabemos a donde vamos, nos venden cualquier paquete, lo embalan, lo etiquetan y nos lo llevamos sin siquiera saber que es lo que estamos comprando, somos tan autosuficientes que cuando estamos en el lecho de la muerte, nos acordamos que Dios es el dueño total de nuestras vidas, que solo va al Padre el que reconoció que solo en Jesús tenemos vida eterna.
Mabel Meneghini"

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"MELODÍAS DE LA SOLEDAD"

Melodías de la soledad" ¡Este silencio ha sido profanado!… por la melodía de un piano, que llora las notas de la soledad que tu amor ha dejado… en las sombras de mi existir, como fantasma deambulo por un mar de bruma y espanto, el sonido de sus acordes son los oleajes que arrastran los recuerdos de nuestras almas… ¡Subsistir tan solo a un recuerdo!... de armonías que se esfuman como el humo de un cigarro… en el cenicero de la vida… crepúsculo de una noche que dejo marcado el mortífero despertar… de la balada del olvido, que suena en las notas nostálgicas de un ayer, Melodías que penetran en mis sentidos trayéndome el latido de tu corazón junto al mió, ¡Como no queriendo que se silencie este amor que me quema por dentro!... melodías que reviven los besos apasionados, las caricias imprudentes de tu osadía en noches de conciertos, fluir de ardientes orgasmos que se dispersan en el interior de mis entrañas como madre selvas, que florecen a la vida, fluye en mi y más te deseo que estés aquí, escribiendo las partituras de nuestro amor… que jamás debe de morir en las notas del concierto de la vida… ¡No!... no me resigno a que estas partituras se extingan en el tiempo del olvido… Amor vuelve a mí y has vibrar las Melodías de la soledad… en mis recuerdos. Mabel Meneghini"